La comunicación parece una herramienta formidable para mejorar la situación de la salud, pero puede ser también un elemento de riesgo o un obstáculo en el camino para lograr sociedades saludables. La comunicación para la salud (incluyendo al periodismo sobre salud), a la que se le ha definido como el proceso de presentación y evaluación de la información educacional persuasiva, incorporativa y atractiva, que conduce a conductas individuales y sociales saludables (Coe, 1998) es una práctica que desde hace más de cinco décadas está en evaluación en la medida en que ha mostrado logros pero también importantes desventajas en el camino de comunicar y compartir salud.
En países como Honduras, Ecuador, Perú, Guatemala, Indonesia, Papua Nueva Guinea, Filipinas, Jordania, Yemen del Norte, Lesotho, Malawi, Nigeria, Zaire, Gambia y Swazilandia las iniciativas se han enfocado en promover la terapia de rehidratación oral (que evita la mortalidad por deshidratación producto de las diarreas infantiles), programa de inmunizaciones, prevención del VIH y de la malaria, tratamiento de infecciones respiratorias agudas, lactancia materna, y planificación familiar. En Burkina Faso, Egipto, Malí, Senegal, Honduras, Perú, Yemen, Filipinas e Indonesia ha habido intervenciones relacionadas con prevención del cólera y de la ceguera de los ríos (oncocercosis), así como campañas para evitar la mortalidad infantil.
Todas estas experiencias, con mayor o menor éxito, han abierto el debate sobre los diferentes desafíos que encara la comunicación para la salud en esta década, especialmente de cara a cumplir con los Objetivos del Milenio. Recordemos que el compromiso de los países signatarios es llegar a 2015 con avances significativos en la reducción de la iniquidad y en la mejora de las condiciones de desarrollo humano de sus sociedades. Tres de los ocho objetivos y siete de las 18 metas se refieren explícitamente a la salud. En palabras de Ilona Kickbusch, asesora de la Organización Panamericana de la Salud para los Objetivos de Desarrollo del Milenio, y profesora de la Universidad de Yale, este énfasis es un reconocimiento del valor de la salud no sólo como indicador de desarrollo, sino también como elemento fundamental para alcanzar una vida mejor para los pueblos
¿Qué se está haciendo en el planeta en materia de comunicación para la salud? ¿Cuáles prácticas innovadoras se están generando en nuestras sociedades? ¿Cuál es el impacto de los procesos comunicativos sobre los programas de salud pública? ¿Cuál es el papel de los nuevos y viejos medios en el empoderamiento de los ciudadanos en temas de salud? ¿Cómo puede mejorar la salud y la calidad de vida de las personas a través de la información y comunicación sobre salud?
En este número de DISERTACIONES (volumen 6, número 2, dedicado Comunicación y Salud) invitamos a la comunidad académica a proponer manuscritos inéditos que sean resultado de investigaciones y estudios sobre este tema.
Plazo de envío de artículos: 30/03/13.
Coordinadores del Número: Acianela Montes de Oca (acianela@gmail.com) y Herly Quiñónez (gomezh@ula.ve)